Los funcionarios de salud de EE.UU. están tomando medidas decisivas para abordar las preocupaciones sobre un ingrediente potencialmente peligroso encontrado en muchos productos de consumo. Después de una creciente presión de la industria de suplementos, la atención se centra ahora en un compuesto relacionado con opioides que está ganando popularidad en productos cotidianos como bebidas energéticas y gomitas. Según ABC News, el ingrediente en cuestión es un componente concentrado extraído del kratom, una planta del sudeste asiático, conocido como 7-hidroximitraginina (7-OH).

Entendiendo la Preocupación

El kratom ha estado en el punto de mira debido a su uso como remedio no aprobado para el dolor, la ansiedad y la adicción. Sin embargo, el controvertido 7-OH, reconocido por ser más potente que la morfina, ha provocado advertencias de los funcionarios de salud. El Comisionado de la FDA, Marty Makary, ha enfatizado la urgencia de elaborar regulaciones estrictas para prevenir otra ola de la epidemia de opioides. Esto ocurre mientras el reciente informe de la FDA destaca la necesidad de distinguir el 7-OH de los productos de hoja de kratom natural, que muchos usuarios argumentan que sirven como alternativas más seguras a los opioides convencionales.

Movimientos Estratégicos de la FDA

En esfuerzos por proteger a los consumidores, la FDA envió cartas de advertencia a fabricantes que promocionan bebidas y suplementos cargados de 7-OH. Estas acciones son elogiadas por partes interesadas en el sector de salud, como Ryan Niddel de Diversified Botanics, enfatizando medidas regulatorias basadas en datos. Simultáneamente, la FDA ha abogado por clasificar el 7-OH junto a sustancias altamente controladas como el LSD y la heroína.

Respuestas de la Industria y Esfuerzos Legislativos

La Asociación Americana de Kratom, que representa los intereses de la industria, ha sido vocal contra la sobre-regulación, haciendo campaña por una protección legislativa que trate el kratom como otros suplementos dietéticos. Esta resistencia surge en medio de investigaciones de seguridad que se remontan una década atrás, destacando problemas de uso indebido e implicaciones adversas para la salud asociadas con el uso de kratom en EE.UU.

El Camino a Seguir

Mientras las discusiones avanzan, la FDA se alinea con intervenciones lideradas por estados que abordan sustancias similares como la tianeptina, a menudo llamada “heroína de estación de servicio”. El camino hacia las restricciones federales puede estar plagado de desafíos, pero el consenso permanece: mitigar los riesgos que plantea el 7-OH es imperativo para la seguridad pública de la salud.

Los funcionarios de salud enfatizan que aumentar la conciencia pública y regular los ingredientes peligrosos son pasos cruciales hacia la minimización de la adicción y la prevención de futuras crisis. A medida que continúa la conversación en torno al kratom, la tensión entre la protección del consumidor y la libertad del mercado sigue siendo un punto vital de consideración.