Durante un dramático llamamiento en su discurso “estado de la unión” ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo, la Presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen pidió la suspensión del libre comercio con Israel. Su argumentación derivó de los planes controvertidos para expandir asentamientos ilegales en toda Cisjordania ocupada, potencialmente dividiendo el territorio a la mitad y socavando peligrosamente la posibilidad de una solución de dos estados.
Una Historia de Dos Regiones
Resaltando la incomodidad de Europa con el conflicto en curso en Gaza, von der Leyen discutió las tensiones inesperadas que enfrenta la UE tras adentrarse en un mundo turbulento. Subrayó la necesidad de que Europa reevalúe su respuesta hacia Israel, en un escenario geopolítico donde las dependencias se convierten en “armas implacables”.
Aprovechando el Apalancamiento Económico de la UE
El discurso de von der Leyen echo un llamado de larga datación por parte de los críticos que instan a Europa a ejercer su influencia como el mayor socio comercial de Israel. La UE representa el 32% del comercio global de bienes de Israel, en fuerte contraste con la mera contribución del 0.8% de Israel al comercio de la UE. Según The Guardian, von der Leyen ahora defiende la suspensión de los aspectos comerciales del acuerdo de asociación UE-Israel. Sin embargo, el bloque europeo sigue profundamente dividido sobre este complejo asunto.
La Repercusión del Discurso
El peso del discurso de von der Leyen resonó mucho más allá de la cuestión del libre comercio con Israel. Con la mirada puesta en cambios estratégicos más amplios, instó a la UE a abandonar su dependencia de decisiones políticas basadas en consenso—un movimiento que ella cree que podría mejorar la eficacia en toda la política exterior europea. Además, reafirmó el compromiso con la agenda climática del bloque y enfatizó la prioridad de la seguridad infantil en las redes sociales.
Una Recepción Dividida
Mientras el discurso fue aplaudido y bien recibido por varios sectores, también suscitó críticas, particularmente de los Miembros del Parlamento Europeo (MEP) de izquierda y de extrema derecha del Parlamento Europeo. Los Socialistas, liderados por Iratxe García Pérez, criticaron las medidas como insuficientes, mientras que Terry Reintke de los Verdes expresó expectativas de acciones más sustanciales. En contraste, los MEPs de extrema derecha se levantaron para desafiar la posición climática de von der Leyen e iniciativas contra la desinformación.
Navegando Desafíos Globales
Frente a un mundo donde las divisiones dentro y fuera de Europa amenazan la estabilidad, von der Leyen concluyó con reflexiones sombrías sobre las dinámicas globales. Enfatizó la intención de la UE de contrarrestar los esfuerzos bélicos de Rusia en Ucrania y confirmó su apoyo a sanciones adicionales sobre el petróleo ruso y las importaciones de combustibles fósiles. La sugerencia de financiar el esfuerzo bélico de Ucrania utilizando €300 mil millones en activos rusos congelados ilustra un entendimiento matizado de las complejidades geopolíticas que definirán el futuro rol de Europa en el escenario mundial.
Este llamado decisivo de Ursula von der Leyen señala un movimiento pivotal en el paisaje político y económico de la UE, donde las decisiones podrían redefinir asociaciones y realinear relaciones globales.