Entre los bulliciosos pasillos de la Universidad Estatal de San Diego (SDSU), una creciente ola de aventura y curiosidad cultural empuja a los estudiantes más allá de los límites de las aulas conocidas. El atractivo de los viajes internacionales los llama, llevándolos a costas lejanas, donde cada encuentro y experiencia se convierte en un peldaño en el camino hacia la ciudadanía global.

El Lenguaje de la Conexión

Para Jared Williams, la melodía de una lengua extranjera resultó irresistiblemente fascinante. Encantado por el ritmo y el sonido del idioma coreano, Jared emprendió un viaje de dominio lingüístico. Como estudiante de informática, Jared se vio inmerso no solo en el aprendizaje del coreano, sino en vivir su cultura de primera mano en las vibrantes calles de Seúl. Esta inmersión cristalizó su convicción de que la vida en Corea es un contraste vibrante con su rutina en casa.

Abrazando la Calidez Europea

La aventura italiana de Tasha Murphy comenzó con incertidumbre, pero pronto evolucionó hacia un viaje de calidez y aceptación. Su inesperada conexión con los locales Marco y Erica alteró su percepción y enriqueció su comprensión de Italia. A través de estas experiencias transformadoras, Murphy cultivó una resiliencia y empoderamiento nuevos que lleva consigo al regresar a San Diego, como lo demuestra su activa participación en iniciativas educativas globales.

Descubriendo la Identidad a Través de los Viajes

Llena de curiosidad, Lizzie Epps persiguió lo inexplorado, integrando perspectivas globales en sus estudios académicos en SDSU. Ya sea conectándose con otros viajeros en Grecia o desafiando sus opiniones preconcebidas en Sudáfrica, cada encuentro floreció en una revelación sobre sus aspiraciones profesionales y su crecimiento personal. Lo que empezó como un pasatiempo, ha despertado en ella una pasión: un impulso para efectuar cambios a través de sus futuros proyectos en los paisajes culturales.

Pasión por la Sostenibilidad

La temprana pasión de Antonio Estudillo por la exploración se intensificó a través de su viaje en SDSU, dando lugar a una experiencia de campo esclarecedora en Indonesia. Allí, la urgencia de la sostenibilidad ambiental resonó en él, subrayando la interconexión de las comunidades globales. Al combinar el conocimiento académico con experiencias prácticas, Antonio imagina un futuro donde el voluntariado en el extranjero amplifique su impacto en la ciencia ambiental, permitiéndole devolver algo a los lugares que lo inspiran.

En un mundo cada vez más interconectado, estas historias de estudiantes de SDSU iluminan las profundas transformaciones personales y profesionales nacidas del compromiso global. A medida que forjan caminos más allá de fronteras conocidas, cada paso no es solo una huella en tierra extranjera; es una búsqueda de comprensión, una formación de identidad y un compromiso con el aprendizaje de por vida.

As stated in San Diego State University.